
Huele al viento que alimenta
A castaña callejera encartonada
Huele a la mano que inventa
Un mural cuajado de nieve pintada
Sabe al abuelo y su nieto
Caminando entre juguetes
Sabe al pequeño, muy quieto
Que se entrega a su banquete
Devorando la espada pirata
Masticando el balón al botar…
Es el niño escribiendo a los Reyes
Es silencio, sonrisas, temblar
Viendo 'números' marcados
Siento la fecha cercana
Revivo aquel tiempo, añorado
Y prendo al petardo su llama...
[Para el/la niño/a eterno/a]